martes, 26 de junio de 2007

BSO



Peter Buck, guitarrista de R.E.M reconocía como con las caras-b uno se puede permitir ser mucho más libre, experimental y gamberro. Es como si en contraste con las caras-a, ke son lo más similar que tenemos al hilo musical de los momentos trascendentes de una vida, las díscolas caras-b, subrayaran cada uno de los minutos absurdos, vacuos y prescindibles de la misma. Las películas cuya banda sonora no está compuesta por música especifica, sino por una relación de viejos hits, se comportan exactamente como una cara-a, al evocar unos años que puede que ni hayamos conocido, pero ante los cuales inmediatamente nos embarga algo cercano a la nostalgia, como si se propusiera una manera común de sentir. Sin embargo alguien debería filmar alguna vez una historia que fuera una cara-b, es decir, que valiera para esos segundos, aparentemente poco importantes, de los ke no figuran en los álbumes de fotos, ni tampoco se cuentan a los nietos, pero en los cuales se dirime realmente lo que es el auténtico día a día.
Mientras espero esa película, en honor a otra que sabe mucho de listas, Alta fidelidad, aquí va la mía sobre bandas sonoras.

Alta fidelidad
Velvet Goldmine
Kill Bill
Casi famosos
Maria Antonieta
Oldboy
Al límite
Lost in translation
Desayuno en Plutón
Las reglas del juego

2 comentarios:

lenoreanabel dijo...

grandes bandas sonoras, tengo que conseguir unas cuantas de esas...la de maria antonieta me encantó y desayuno en plutón, tremenda!!!

Mr. D dijo...

Va, que este post esta muy bien escrito, amigo Reynolds. Congratulations.

Bueno, mi Top Ten de soundtracks no sería el mismo que el tuyo (me sobran muchas y me faltan títulos como Hasta que llegó su hora, de Morricone o A Tale of Two Sisters) pero se te aprecia el buen gusto.